El estado emocional de la sociedad actual pareciera decaer cada vez más y es así como la depresión ha llegado a establecerse como la enfermedad de moda, pues se trata de un padecimiento al que de alguna manera nos hemos acostumbrado tanto que ya poco nos sorprende que ahora sea una causa más de las bajas laborales o educativas y que además sea determinante para anular las relaciones humanas.
Al ser una enfermedad que afecta tanto la mente como el cuerpo, para superarla se requiere de un trabajo donde se cubran todos los frentes. En otras palabras para superar la depresión es necesario curar tanto el alma como el tipo de pensamientos a los que se le dan prioridad.
La era de la depresión y las enfermedades del alma
Las emociones y sentimientos que experimenta una persona en este estado son tan negativas y poderosas que en sus manifestaciones más profundas acaban por llevar a que este individuo considere que no vale la pena seguir viviendo, así que aunque estamos hablando de un proceso ciertamente complejo también es algo que puede lograrse siempre y cuando se cuente con la orientación adecuada.
Puesto que en el siglo XXI pareciera haberse dejado conquistar por este trastorno, se hace más que importante informarse para saber manejarlo.
Sugerencias para dejar atrás la depresión
- Retomar el camino espiritual. Actualmente, las personas suelen enfocarse en sus objetivos económicos, profesionales y hasta de pareja olvidando por completo lo trascendente de una buena relación con Dios. La conexión adecuada con esta fuerza divina ejerce un poder sanador que nada puede superar, así que se hace fundamental restablecer la comunicación el Todopoderoso y leer más hasta encontrar el camino de regreso a su infinito amor.
- Aceptar y entender la enfermedad. Lo más sano en estos casos es buscar la ayuda idónea para entender de qué se trata la depresión y así aceptar y reconocer lo que está pasando. Luego de esto será más sencillo empezar el proceso de cura ya que se estará más abierto a comprender que es algo transitorio.
- Activarse físicamente. Aunque probablemente no se tenga mucho ánimo, hacer un esfuerzo para hacer ejercicio o cualquier rutina deportiva equivale a estimular al cerebro para que produzca endorfinas que causan la sensación de tranquilidad e incluso felicidad.
- Cuida tu presentación personal y espacio. Estos pequeños esfuerzos te ayudan a mantenerte dentro de lo que seguramente harías sino estuvieras pasando por este momento. A pesar de sentirte tan mal, no dejes de ser quien eres, simplemente actúa y no te niegues a recibir ayuda.