Inocencio III fue un papa de carácter fuerte y decidido volviéndose un importante dirigente en la Edad Media para la iglesia católica y la fe de los creyentes, frenando el resurgir de herejías y el poder musulmán. Nació en Agnani el año 1160 y convirtiéndose en cardenal a los 29 años también se formó en la universidad como teólogo.
Inocencio III, se hizo distinguir por los emperadores y reyes de Europa, como papa interfirió en todas las problemáticas que se le presentaron en el ámbito religioso e incluso político, dada su herencia noble, se postraba por encima de cualquier gobernante y siendo nombrado como el primer “Vicario de Cristo”.
Obras como dirigente en la edad media
Esta figura papal impuso múltiples medidas para defender el legado católico, desde dirigir las crazadas en contra de los cátaros, vistos como enemigos de la iglesia que fueron erradicados por orden de Inocencio III, contribuyo a la formación de la Inquisición como instrumento para erradicar la herejía. Combatió a los musulmanes y excomulgo a múltiples cruzados en el proceso por saquear Constantinopla, considerado como un desvió de la empresa de Inocencio III.
Muerte y sepultura
Durante uno de sus viajes a través de Italia en el año 1.216, fallece a sus cincuenta y seis años de edad sin lograr ver el fin de la cruzada en contra de los cataros, fue sepultado en la catedral de Perugia por un largo plazo hasta que León XIII, transfiere sus restos a luterano en diciembre del año 1.891.